Con mucha pena informamos el fallecimiento de nuestro colaborador e incansable defensor de la lengua y la cultura sefardí, Gad Nassi.
Gad Nassi nació y estudió en Estanbul, habiéndose graduado en el Galatasaray High School y en la Facultad de Medicina de la Universidad de Estambul.
Comenzó su carrera como autor durante sus estudios en la secundaria, escribiendo para revistas locales, así como la traducción de artículos populares del francés y del inglés al turco.
Mientras trabajaba en instituciones psiquiátricas en Estambul e Israel, condujo investigaciones clínicas, que fueron publicados en revistas especializadas.
Durante sus estudios universitarios, se desempeñó como director de Shalom, el periódico de la comunidad judía de Turquía; como corresponsal de varias publicaciones extranjeras; y también dirigió la oficina de prensa del consulado israelí en Estambul.
Su experiencia en Shalom y su papel activo en los asuntos comunales le convencieron para utilizar la lengua turca para incentivar en los jóvenes judíos sus raíces culturales y comunales.
De esta forma, fue uno de los precursores en favorecer un diálogo abierto entre las generaciones, permitiendo a la nueva generación de Judios de Turquía desarrollar un sentido positivo de la identidad cultural y social.
En 1986, fundó Morit, una organización para la preservación y la promoción del patrimonio comunidad judío turca. Como presidente de esa intitución, organizó el «Primer Congreso Internacional sobre la comunidad judía de Turquía», en Israel en 1989. La conferencia constituyó una de las piedras angulares en la mejora de las relaciones entre Turquía y el mundo judío, y, en particular, con Israel.
Inició -en colaboración con la WIZO Israel y el Municipio de Tiberíades- la reunión conmemorativa en diciembre de 1990 en la localidad de Tiberíades en honor a Doña Gracia Nasi. En el marco de este evento, fue co-autor con Rebecca Toueg de una obra biográfica titulada Dona Gracia Nasi.
Con Moshe Shaul, organizó el «Primer Encuentro Internacional sobre judeo-española» en Tel Aviv en 1994. Esta conferencia dio lugar a la creación de fundaciones para preservar y promover la lengua y la cultura judeo-española.
Editó y parcialmente fue el autor de «El periodismo judío, imprentas en el Imperio otomano y en la Turquía Moderna», publicado en 2001.
Inspirado por sus reminiscencias de la utilización de judeo-español dentro de su familia y una preocupación para promover la lengua española judeo dentro de un entorno contemporáneo, editado y parcialmente escribió «en Tierras Ajenas yo me Vo Murir» (en Tierras extranjeras moriré), una antología de memorias, cuentos y leyendas, que se publicó por primera vez en Estambul y después en Barcelona en el año 2005.
Durante el acto de presentación de con motivo de su publicación en España, organizado por la Embajada de Turquía en Madrid, hizo hincapié en que la tradición judeo-español es una parte común de la herencia judía, Ibérica y turco, y el patrimonio de otros países.
Desde 1989, ha publicado numerosos artículos sobre el movimiento mesiánico sabateano.Estas publicaciones abrieron un nuevo camino en la comprensión del movimiento dentro del contexto de la tradición otomana y el legado judío otomana.
Fue uno de los promotores y fundadores de El Amaneser, un suplemento mensual en judeo-español del periódico Shalom en Estambul que se sigue publicando regularmente con artículos sobre temas históricos, místicos y folklóricos.
Presentó una ponencia en la XV conferencia anual de la Sociedad de Estudios Crypto-judías.
El estimaba que el acercamiento entre cripto-judíos de ascendencia sefardí con los judíos sefardíes constituye un campo valioso y sin explotar para la comprensión y la integración de su identidad espiritual recíproco.
Ke su alma repoze en paz
Gad Nassi ha colaborado personalmente con publicaciones en eSefarad.com. Las mismas pueden verse aqui.
Gad Nassi invitó a nosotros del grupo judeo-español marroquí Gerineldo, hacer un conicerto para conocer las diferencias entre las canciones judeo-españolas marroquies, turcas, búlgaras, etc…. hace muchos años ya, a principio de los 90. De allí nació una bella amistad, y me quedé, con mi hija, varias veces en su casa en Israel, con su lindísima familia, su esposa Inci y los hijos. La más joven jugaba con mi hija…. He seguido su trabajo, y he aprendido mucho leyendolo; él mismo siempre ha sido amable y generoso. Mucha simpatía a toda la familia, desde Toronto, Canadá.