Salgueiro destaca la importancia que supone para los sefardíes poder solicitar la nacionalidad española

La delegada del Gobierno en Castilla y León, María José Salgueiro, ha participado este miércoles en un encuentro en Burgos con la comunidad judía de Kfar Vradim. Salgueiro ha estado acompañada del subdelegado del Gobierno en Burgos, Roberto Saiz, el Subdelegado de Defensa, Javier Martínez de Lagos, el comisario Jefe Provincial, Jesús María Nogales y el teniente Coronel Jefe de la Comandancia, Alfonso Martín.

La delegación judía, por su parte, ha estado encabezada por el alcalde de Kfar Vradim, Sivan Yechiele, el director del Centro Sefarad Israel en España, Miguel de Lucas y el alcalde de Castrillo Mota de Judíos, Lorenzo Rodríguez.

El motivo es el Hermanamiento que harán ambos municipios esta tarde en el Ayuntamiento de la localidad burgalesa.

Salgueiro y Saiz han recordado la importancia que supone para los sefardíes poder solicitar la nacionalidad española, una vía que se abrió en 2015 y que ha permitido a lo largo de los años 2016 y 2017 que 1.708 descendientes de los judíos expulsados en 1492 sean reconocidos como nacionales españoles.

El 1 de octubre de 2015 entró en vigor la ley que permite conceder la nacionalidad española a los descendientes de los sefardíes expulsados de España en época de los Reyes Católicos.

Al día siguiente, el Consejo de Ministros aprobó un real decreto que concedió la nacionalidad española, por carta de naturaleza, a 4.302 sefardíes que habían acreditado ser descendientes de aquellos judíos expulsados hace más de 500 años.

Por países, en 2016 las más numerosas procedían de Israel (96), Venezuela (75) y Colombia (60), en tanto que en 2017 la mayoría de solicitantes tenían su origen en Venezuela (254), Israel (202) y México (146).

En el tramo de edad comprendido entre los 18 y 44 año en 2016 hubo 40 peticiones cursadas desde Israel, 36 de Venezuela y 22 desde Brasil; al año siguiente se registraron 117 de Venezuela, 75 de Israel y 71 de México.