El curioso origen de la calle Susona de Sevilla, antigua calle de la Muerte

Susona Ben Susón era la hija de un importante banquero judío, los cuales vivían en la antigua judería de Sevilla, un barrio que era asaltado continuamente por los cristianos

Como ya se ha comentado en otras ocasiones, Sevilla es una ciudad llena de leyendas e historias. Sin duda, el origen de la Calle Susona tiene una gran historia detrás. Esta calle que se encuentra en pleno barrio de Santa Cruz, lo que era la antigua judería de Sevilla, tenía el nombre de Calle de la Muerte. La historia que tiene detrás el nombre de la calle no es ninguna leyenda, sino es una historia real que ocurrió en el siglo XIV.

Susona Ben Susón era la hija de un importante banquero judío, los cuales vivían en la antigua judería de Sevilla, un barrio que era asaltado continuamente por los cristianos a causa de la envidia que le tenían, debido al modo de vida que llevaban los judíos. Acabaron con la vida de más de un centenar de ellos.

Harto de esta situación, Diego Susón, padre de Susona, la cual era conocida en el barrio como «La fermosa Fembra», decidió tomar represalias contra los cristianos y reunió a un grupo de judíos adinerados que vivían en el barrio.

Susona, que era una hermosa joven, se veía en secreto con un noble e importante caballero cristiano. Quería ascender en la escala social motivada por los halagos que diariamente solía recibir.

Para preparar el ataque a los cristianos, Diego Susón se reunió en su casa con el grupo de judíos, armando un plan con el fin de asesinar a un gran número de cristianos. Susona, al oír todo lo que habían planeado, acudió a su amado rápidamente para informarle de las intenciones que tenían los judíos.

Los cristianos se anticiparon a la posible rebelión tomando medidas. El padre de Susona, Diego Susón, junto a unos 20 judíos más fueron ahorcados en en la horca de Tablada. Susona arrepentida se marchó a un convento donde permaneció hasta el día de su muerte.

Al morir y abrir su testamento, comprobaron que escribió lo siguiente: «Y para que sirva de ejemplo a los jóvenes y en testimonio de mi desdicha, mando que cuando haya muerto separen mi cabeza de mi cuerpo y la pongan sujeta en un clavo sobre la puerta de mi casa, y que quede allí para siempre jamás».

Llevándose a cabo todo lo que dijo y permaneciendo en el lugar un poco menos de dos siglos, sustituyéndose por un azulejo de cerámica trianera. En la casa se puede ver el siguiente azulejo escrito: «EN ESTOS LUGARES, ANTIGUA CALLE DE LA MUERTE PUSOSE LA CABEZA DE LA HERMOSA SUSONA BEN SUSÓN, QUIEN POR AMOR A SU PADRE TRAICIONÓ Y POR ELLO ATORMENTADA DISPUSOLO EN TESTAMENTO».

Fuente: Diario de Sevilla | 17 Julio, 2023